Animalitos

Reconozco que soy rencorosa y vengativa, sobre todo cuando las injusticias se comenten contra víctimas indefensas, y desde que soy pequeña, cuando mi padre y yo vemos en los informativos imágenes de toreros desgraciados por uno de estos toros, no podemos dejar de sonreirnos, con la amarga sensación de que al final existe algo de justicia divina.
Y seré una tremenda hija de puta, pero mientras algunos miles de personas se alegran y festejan el asesinato a sangre fría de un toro, yo no puedo dejar de alegrarme con la cogida de un torero por un toro drogado, sin fuerzas y con los músculos desgarrados por varios arpones. ¡Que se jodan por asesinos! El que a hierro mata...
NO A LOS TOREROS
1 Comments:
Y sí, es una atrocidad. Y es fiesta nacional!! A mi padre siempre le gustaron y nunca supo explicarme muy bien por qué...
Publicar un comentario
<< Home