Artistas de cagaderos

La sabiduría popular nos persigue y se nos echa encima en cada esquina. Esta joya la rescaté de un viaje a Ons, más concretamente en el aseo de chicas del restaurante Acuña. Personalmente, gran parte de lo que soy como persona se lo debo (además de a la televisión, eso ya se sobreentiende) a las notas que escribe la gente en las puertas de los aseos. Son fantásticas y las hay de todos los estilos: las que te conmueven, las guarras, las de personas en crisis existencial que piden consejo y las que los dan aunque nadie lo pida. ¿Qué hay más romántico que escribir el nombre de tu enamorad@ en la puerta del baño? Mientras meas o cagas puedes aprovechar para garabatear que no te olvidas nunca de él! Además, el retrete es un lugar tan íntimo e inolvidable que todos quieren dejar constancia de que "yo estuve aquí. 27-04-2006", para que las siguientes generaciones de meadores compulsivos se acuerden de ellos mientras se instalan cómodamente en el retrete.

Ahora sé que mi vida no está completa. Me avergüenza reconocer que yo nunca escribí ningún comentario en las puertas de los cagaderos. Sí, es cierto. Agacho la cabeza y entono el mea culpa. Y sinceramente, no creo que lo vaya a hacer, yo no tengo el DON. Lo que sí que creo que alguien debería hacer es rendirles el homenaje que se merecen y recolectar toda esta sabiduría popular. ¡Qué maravillosa exposición fotográfica se podría montar! A partir de hoy no me voy a un baño público sin una cámara de fotos encima!!! (y no bromeo)

Desde aquí rindo este pequeño homenaje a los garabateadores de cagaderos, por hacernos la meada más entretenida.

Y, por cierto, comparto: antes puta que virgen. Y espero que sea cierto eso de "putas todas", y le añadimos eso de "...y putos todos", no vaya a ser... La vida está para vivirla y que cada un@ decida qué le va a hacer más feliz, y vamos a dejarnos de joder a los demás en el mal sentido del término (el metáforico, por si hace falta aclaraciones).